La bolsa de valores de Nueva Zelanda se mantuvo cerrada este jueves para cotizar luego de los ciberataques que recibió durante los últimos dos días, dijo el operador de bolsa NZX Ltd. El intercambio señaló problemas de conectividad de red por los ciberataques y dijo que espera reanudar el viernes. “Esta decisión de no reabrir […]
La bolsa de valores de Nueva Zelanda se mantuvo cerrada este jueves para cotizar luego de los ciberataques que recibió durante los últimos dos días, dijo el operador de bolsa NZX Ltd.
El intercambio señaló problemas de conectividad de red por los ciberataques y dijo que espera reanudar el viernes.
“Esta decisión de no reabrir se tomó mientras nos concentramos en abordar la situación”, dijo la bolsa en un comunicado.
La bolsa aceptó la llamada para no reabrir la junta principal, el mercado de deuda NZX y el mercado de accionistas de Fonterra después de que se detuviera la negociación a las 11:10 a.m. hora local (2310 GMT). NZX también cerró el mercado de derivados el jueves.
“Continuamos abordando la amenaza y trabajando con expertos en ciberseguridad y estamos haciendo todo lo posible para reanudar el comercio normal mañana”, dijo NZX.
Los ciberataques del martes y miércoles se dirigieron al proveedor de red del intercambio a través de un ataque distribuido de denegación de servicio (DDoS). Las operaciones se vieron afectadas por diferentes períodos de tiempo.
NZX dijo que había sido golpeado por primera vez por un ataque distribuido de denegación de servicio (DDoS) desde el extranjero, el martes.
El incidente sigue a una serie de supuestos ataques cibernéticos por parte de actores extranjeros, como el ataque a una variedad de organizaciones gubernamentales y del sector privado en Australia.
En un comunicado el miércoles anterior, NZX culpó del ataque del martes a ciberdelincuentes internacionales, diciendo que había “experimentado un ataque DDoS volumétrico desde el extranjero a través de su proveedor de servicios de red, que afectó la conectividad de la red NZX”.
El pasado 11 de agosto, muchos españoles estuvieron recibiendo correos electrónicos que decían provenir de la Agencia Tributaria. Estos correos utilizaban un remitente falso como “Servicio de Administración Tributaria” y la dirección de correo electrónico contato@ acessofinanceiro[.]com para engañar a los destinatarios haciéndoles creer que habían recibido una comunicación oficial de la agencia tributaria.