Aunque no queda claro si se trata de algún tipo de estrategia publicitaria, el ataque en contra de Cover Protocol puso en evidencia los problemas de seguridad que tiene el proyecto. Cover Protocol, una propuesta dentro del espacio de las finanzas descentralizadas (DeFi), fue víctima de un ataque que derivó en el robo de USD $4 millones y […]
Aunque no queda claro si se trata de algún tipo de estrategia publicitaria, el ataque en contra de Cover Protocol puso en evidencia los problemas de seguridad que tiene el proyecto.
Cover Protocol, una propuesta dentro del espacio de las finanzas descentralizadas (DeFi), fue víctima de un ataque que derivó en el robo de USD $4 millones y generó una caída del 95% del precio del token, aunque el caso tomó un giro inesperado en el que los atacantes terminaron devolviendo los fondos a las víctimas.
De acuerdo con información publicada por diversos medios, el grupo responsable del ataque fue uno llamado Grap Finance, el cual se atribuyó la autoría de los hechos a través de su cuenta oficial de Twitter. Reportes asociados con el caso indican que los atacantes aprovecharon un exploit presente en el código del proyecto, con el cual replicaron los tokens respectivos.
Si bien siempre existe la posibilidad de que un protocolo DeFi sea vulnerado y que los atacantes sustraigan los fondos de los clientes, lo ocurrido en este caso genera ciertas dudas entre analistas y entusiastas que siguieron de cerca el caso.
En lugar de tomar los fondos, el equipo de Grap Finance publicó un mensaje en su cuenta de Twitter especialmente dirigido al equipo de Cover Protocol, en el cual los invitaban a asumir la responsabilidad por lo ocurrido y mostraron evidencia de la devolución de los fondos respectivos.
Lo curioso en este caso, más allá de la devolución de los fondos, es que no queda claro por qué el equipo de Grap Finance perpetró el ataque en contra de Cover Protocol.
Si bien muchos destacan que todo parece una especie de truco publicitario, críticos y analistas ponen sobre la mesa que, detrás de todo esto, quedó en evidencia lo vulnerable que son algunos proyectos en el espacio DeFi, así como lo fácil que resulta para los inversionistas perder sus fondos si estas vulnerabilidades en el código las aprovechan atacantes menos escrupulosos.
Por otra parte, personas mucho más optimistas en torno a lo ocurrido señalan que Grap Finance en realidad terminó salvando a Cover Protocol, justamente porque visibilizó un problema estructural importante, en el cual ahora deben trabajar los ingenieros del proyecto para evitar brechas de seguridad similares.