Desarticulan banda que clonaba rostros y vaciaba cuentas bancarias en Chile

La Operación Contracara permitió la captura de 14 personas acusadas de usar técnicas sofisticadas que iban desde phishing hasta suplantación biométrica, y que fueron utilizadas para abrir cuentas falsas y robar más de $127 millones a víctimas en distintas regiones del país.

Una operación policial liderada por la PDI terminó con la detención de 14 personas en las regiones Metropolitana, O’Higgins y La Araucanía, acusadas de integrar una banda que operó durante años simulando identidades para vaciar cuentas bancarias. La Fiscalía alertó que los montos defraudados superan los $127 millones, y no se descarta que la cifra aumente conforme avancen las diligencias.

El grupo delictual funcionaba con una estructura piramidal, en la cual había sujetos cuyo rol era robar credenciales mediante correos maliciosos de phishing, quienes adquirían esos datos para luego comercializarlos en la dark web, y otros se ocupaban de suplantar a las víctimas ante sistemas biométricos de bancos.

Una vez en manos de los delincuentes, las credenciales permitían abrir cuentas paralelas a nombre de personas sus víctimas. Con esas cuentas como “trampolín”, se realizaban transferencias sucesivas generalmente montos entre $50 mil a $500 mil- para evitar levantar alertas, y de esa manera drenaron el dinero de las cuentas legítimas de las personas afectadas.

El jefe de la Brigada del Cibercrimen Metropolitana, subprefecto Gerardo Raventós, explicó que la banda comenzó a operar en 2022, inicialmente en la comuna de Lo Espejo, y luego expandió sus actividades a otras regiones. Algunos integrantes eran permanentes, mientras que otros rotaban, desde captadores de testaferros hasta quienes ejecutaban el fraude informático.

De acuerdo con lo informado por la Fiscalía, la denuncia inicial fue presentada por un banco tras recibir 284 reclamos entre septiembre de 2022 y marzo de 2023. Durante ese periodo se registraron pérdidas por $127 millones, aunque los delitos continuaron hasta hace pocas semanas, según escuchas telefónicas recientes.

Los 14 detenidos enfrentan cargos por asociación delictiva, fraude informático reiterado, usurpación de identidad y lavado de activos. Entre ellos, el líder del grupo ya poseía antecedentes por delitos informáticos. El resto, sin embargo, tienen un historial “irreprochable”.

El seremi de Seguridad Pública, Alejandro Jiménez, destacó que la coordinación entre la Policía de Investigaciones (PDI) y Fiscalía, señalando que la acción envía una señal clara contra las organizaciones que combinan crimen organizado con delitos cibernéticos.

Este caso revela la evolución de los fraudes en nuestro país, evolucionando desde el robo de tarjetas o claves, para ahora usurpar y crear identidades con tecnologías biométricas para engañar a los sistemas de seguridad bancaria. La técnica de “clonación facial” o suplantación de identidad abre una alerta para instituciones financieras y usuarios, que deben fortalecer sus mecanismos de verificación y su prevención ante correos sospechosos.