Las autoridades investigan una intrusión que dejó expuesta la información de millones de personas en Marruecos, esto en medio de acusaciones cruzadas y el escalamiento de un conflicto geopolítico que sostiene con Argelia en el norte de África.
Las autoridades marroquíes investigan un ciberataque a gran escala que expuso datos personales de aproximadamente dos millones de ciudadanos, un hecho que no solo pone expuso la vulnerabilidad cibernética del país, sino que también reavivó tensiones históricas con la vecina nación de Argelia. La agencia afectada, la Caja Nacional de Seguridad Social (CNSS), confirmó la brecha en sus sistemas y aseguró estar analizando el alcance del incidente.
El grupo de hackers JabaROOT se adjudicó la autoría del ataque y publicó un comunicado en el que acusa a Marruecos de lanzar ofensivas digitales contra instituciones argelinas. Además, advirtieron sobre nuevos ataques si las agresiones virtuales continuaban. Como muestra de su capacidad, difundieron una captura de pantalla que evidenciaría la alteración del sitio web del Ministerio de Trabajo marroquí, el cual fue dado de baja poco después del incidente.
En paralelo, la firma estadounidense especializado en ciberseguridad Resecurity reveló que parte de los archivos robados fueron compartidos en foros clandestinos de la dark web, aunque sin fines comerciales, lo que sugiere un motivo político más que financiero.
La filtración, que se difundió a través de un canal público de Telegram, incluía nombres completos, números de identificación nacional, afiliaciones laborales, correos electrónicos, teléfonos y hasta datos bancarios. Se estima que fueron comprometidos más de 54 mil archivos, algunos fechados en noviembre de 2024.
La CNSS emitió un comunicado oficial señalando que varios de los archivos filtrados “parecían engañosos, inexactos o incompletos”, pero confirmó que una investigación está en marcha. Hasta el momento, no se ha responsabilizado formalmente a ningún actor específico, aunque las pistas apuntan a un conflicto con trasfondo político.
En el plano diplomático, el conflicto escaló justo en el contexto en el que la cuenta en la red social X del medio estatal argelino Argelia Press Service fuera presuntamente hackeada. El perfil fue renombrado como “Sahara Marocain”, en alusión directa a un conflicto que ambos países sostienen por el Sáhara Occidental.
Este último episodio es parte de una disputa regional más amplia. Desde 2021, Marruecos y Argelia rompieron relaciones diplomáticas, lo que provocó el cierre del espacio aéreo entre ambos países, el corte de suministros de gas y restricciones de visado. El Sáhara Occidental sigue siendo el epicentro de ese conflicto, y es posible que tenga nuevas repercusiones luego que los Estados Unidos se mostrara a favor de la propuesta marroquí de autonomía ampliada para ese territorio, una declaración que no fue bien recibida por Argelia.
