Grupo Bupa se querella por hackeo a ejecutivos que generó perjuicios de más de $300 millones de pesos

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La acción judicial, por delitos informáticos, fue presentada la semana pasada en el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, esto tras conocerse la vulneración de las credenciales de dos ejecutivos de Integramédica que permitió que actores maliciosos autorizaran millonarias facturas fraudulentas.

Dos ejecutivos de Integramédica sufrieron la falsificación de sus identidades de Clave Única y Clave Tributaria, lo que permitió que cibercriminales pudieran autorizar facturas por bienes y servicios no prestados por la entidad ante el Servicio de Impuestos Internos.

Los hechos descritos salieron a la luz pública la semana pasada y dan cuenta de una técnica de ataque que se vuelve a repetir este año, y que anteriormente tuvo como víctimas a entidades como Microsoft Chile y Antofagasta Minerals.

En esta oportunidad, el ciberataque a los ejecutivos de Integramédica significó un perjuicio por más de 300 millones de pesos.

A raíz del incidente, el Grupo BUPA, controlador de la entidad afectada, presentó una querella ante el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago contra todos los responsables de este presunto delito informático.

En específico, la querella apunta a los delitos de “abuso de dispositivo, acceso ilícito, falsificación y uso malicioso de instrumento privado mercantil”, según recogieron los medios nacionales que tuvieron acceso al documento.

Los atacantes habrían vulnerado los dispositivos de los ejecutivos, lo que les permitió acceder a las plataformas utilizadas por las víctimas y, como consecuencia, pudieron ingresar utilizando sus credenciales al Servicio de Impuestos Internos y “aceptar expresamente facturas por servicios y/o compra de bienes no prestados, alterando el normal funcionamiento de los procesos de compra del Grupo Bupa Chile”, añadieron en la querella.

La querella señala también que los hechos descritos podrían derivar en “otros tipos delictuales” si las entidades afectadas se ven obligadas a desembolsar otras sumas de dinero a los factoring que se han hecho con las facturas falsas emitidas.