La medida tiene como objetivo disuadir a los “malos actores” de “poner en peligro la integridad” de la plataforma y se aplicará a los usuarios sospechosos de infringir las normas de la plataforma.
El popular servicio de mensajería Telegram ha implementado una actualización significativa en su política de privacidad, permitiendo compartir direcciones IP y números de teléfono de usuarios con las autoridades en casos de violaciones a las reglas de la plataforma.
Este cambio, anunciado por su fundador, Pavel Durov, se aplicará cuando se reciba una solicitud legal válida y una orden judicial que confirme la implicación del usuario en actividades criminales.
Anteriormente, Telegram solo compartía esta información en casos relacionados con sospechas de terrorismo. Sin embargo, la nueva política se extiende a cualquier actividad que viole los términos de servicio de la aplicación, como la venta de productos ilegales a través de la función de búsqueda.
«Si Telegram recibe una orden válida de las autoridades, realizaremos un análisis legal y, de ser necesario, proporcionaremos la información solicitada», explicó Pavel Durov a medios internacionales.
Además, Telegram ha fortalecido la seguridad de su sistema de búsqueda, que ha sido usado para promocionar productos ilícitos. Como muestra de ello, durante las últimas semanas la plataforma ha implementado inteligencia artificial para eliminar contenido problemático de los resultados de búsqueda, haciendo que sea «mucho más segura», afirmó el representante de la plataforma.
Por otra parte, Durov señaló que los usuarios también podrán reportar actividades ilegales a través del bot @SearchReport.
Esta actualización llega en un momento delicado para Durov, quien está siendo investigado en Francia por su presunta complicidad en delitos como el tráfico de drogas y la distribución de contenido ilegal a través de Telegram.
Aunque Durov fue liberado bajo fianza, las autoridades francesas siguen investigando su rol en estos casos. Al mismo tiempo, Ucrania ha prohibido Telegram en dispositivos gubernamentales, citando preocupaciones de seguridad nacional, esta también en el contexto de guerra con Rusia que vive ese país desde hace casi tres años.
Con el rápido crecimiento de Telegram a casi mil millones de usuarios, Durov reafirmó su compromiso de mejorar la seguridad y evitar que «actores maliciosos pongan en peligro la integridad de la plataforma».