Durante la mañana de este jueves y hasta pasado el mediodía, se llevó a cabo la tercera versión de conferencia de ciberseguridad 8.8. Gobierno, la que está dirigida principalmente a encargados de ciberseguridad del Estado y de la Red de Conectividad del Estado.
El evento, que se desarrolló de forma presencial en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, fue organizado conjuntamente por 8.8 y el CSIRT de Gobierno, y contó con la presencia de seis speakers en cinco diferentes charlas. Una de ellas, fue dictada por Caetano Borges, estudiante de Ingeniería Informática de la PUC, y quien también es parte del equipo de NIVEL4.
Caetano fue coautor de la ponencia “Aprender ju(hack)ndo: Explotando bugs reales en competencias de ciberseguridad”, junto a Renato Garretón, quien se desempeña como Content Developer en OffSec, otra empresa del rubor de la ciberseguridad de nuestro país.
Caetano nos comentó que el foco principal de la ponencia fue demostrar que las competencias cómo los CTF (Capture The Flag) ayudan significativamente al aprendizaje de la ciberseguridad y pueden convertirse en un importante método para transmitir contenidos educativos sobre el tema.
Durante su presentación los ponentes hicieron hincapié en que, pese a que los CTF pueden ser algo distante para el público general, de todas formas, pueden ser un agente capaz de motivar a la participación y promover las instancias de mejora profesional, incluso para quienes se aproximan a este tipo de desafíos desde un nivel básico y que podrían, eventualmente, alcanzar un nivel técnico.
La charla tocó, en varios aspectos, la experiencia que los autores han tenido en competencias de este estilo y como este tipo de instancias pueden impactar en forma práctica en la mejora de la seguridad de software reales. Caetano, por ejemplo, nos comentó que una oportunidad, mientras jugaba en un CTF, pudo encontrar un ataque en una librería glibc, lo que permitió mejorar directamente la seguridad de ésta.
En ese sentido, lo ponentes postularon que este tipo de métodos de aprendizaje práctico pueden llegar a tener importantes ventajas frente a la educación superior tradicional o las certificaciones, pudiendo perfectamente ser complementarias a estás.
La charla de ambos se extendió por cerca de 45 minutos y obtuvo una positiva valoración del público presente.
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