Dinamarca impulsa ley para enfrentar el deepfake otorgando copyright de cuerpo, imagen y voz a las personas

La nueva propuesta legislativa otorgaría a las personas derechos exclusivos sobre su imagen, voz y características físicas, enfrentando el uso no autorizado de inteligencia artificial generativa. Autoridades danesas buscan promover la medida durante su presidencia del Consejo de la Unión Europea este año.

Con el propósito de frenar el uso indebido de deepfakes y proteger la identidad digital de las personas, Dinamarca busca impulsar una legislación que podría convertirse en un precedente en Europa, al otorgar derechos de autor de todo individuo sobre su rostro, voz y apariencia física frente a representaciones digitales realistas generadas por inteligencia artificial.

El proyecto, respaldado por casi todos los partidos políticos de ese país, ya fue enviado a consulta pública el pasado 7 de julio y se espera que sea presentado formalmente en el Parlamento antes de finales de este año.

La nueva normativa contempla dos artículos clave: el primero, prohíbe la publicación de deepfakes que reproduzcan actuaciones artísticas sin el consentimiento del intérprete (art. 65a); el segundo, y más innovador, protege las características personales y físicas de cualquier persona natural (art. 73a), sin requerir que esta sea de un artista o creador.

«Los seres humanos pueden ser pasados por una copiadora digital y utilizados para todo tipo de fines. No estoy dispuesto a aceptar eso», declaró el ministro de Cultura de ese país, Jakob Engel-Schmidt, en una entrevista concedida el diario británico The Guardian. «Con esta ley, enviamos un mensaje inequívoco: todos tienen derecho a su cuerpo, su voz y su rostro», enfatizó la autoridad.

La ley danesa ya reconocía de forma dispersa el derecho a la imagen a través de normas en el Código Penal, la Ley de Protección de Datos y la Ley de Prácticas de Marketing. Sin embargo, el avance de la tecnología ha dejado lagunas difíciles de cubrir por la actual normativa. Hasta ahora, las reglas no contemplaban explícitamente los deepfakes ni garantizaban un marco claro para su regulación.

Con esta reforma, los ciudadanos podrán exigir que las plataformas digitales que retiren contenidos que utilicen sus características personales sin permiso, e incluso reclamar compensaciones económicas. Aunque se excluyen los usos de imágenes cuando se tratan de parodias, sátiras o de crítica social, la ley establece que estas imitaciones no estarán permitidas si constituyen desinformación o representan una amenaza seria para los derechos fundamentales como la privacidad o la reputación.

El ministro Engel-Schmidt, anticipó que Dinamarca promoverá esta agenda durante su presidencia del Consejo de la Unión Europea que comenzará este año, e indicó que las empresas tecnológicas, productoras de contenido y plataformas digitales deberán adaptarse a este cambio. «Si las plataformas no cumplen, estamos dispuestos a dar pasos adicionales. Esto incluye multas severas y eventualmente involucrar a la Comisión Europea», advirtió la autoridad.